Estación de tren Sarmiento, Buenos Aires - Argentina.
Abril, 2015
PODERES DE VOS
Vamos
a hablar de los poderes,
¿te
parece?
¿te
parece pertinente hacerlo ahora?
Porque
a mi si ¿sabés?
A mi
si me parece pertinente.
Pero
no,
no,
cuando
te hablo de poderes,
cuando
yo te hablo de poderes
no
me refiero a los poderes que vos pensás,
no
me refiero a eso.
Me
refiero a los poderes … de vos
A
los que vos tenés;
a los
que tenés como individuo
y a
los que tenés sobre mi también.
Porque
tenés poderes sobre mi;
y no
es algo que me enorgullezca particularmente,
o
generalmente,
o
incluso
es
algo que no me enorgullece en lo absoluto.
Pero
acá estás,
acá
estás vos,
y
acá estoy yo;
y
acá está tu poder,
sobre
mi.
Pero
no vamos a discutir por eso.
No
vamos a hacer un baile
con mis
preguntas y tus respuestas,
eso sería
un poco pernicioso,
o
como dirías vos,
“poco
pertinente”.
Pero
bueno,
la
ingenuidad puede ser a veces un poco indulgente
¿no
creés?
¿Mi
amor?
Además
si,
¿por
qué no?
Ahora
que lo decís,
si,
vamos
a hablar un poco de mi también.
De
eso podemos hablar un poco,
porque
si,
yo también
tengo un poco de poder.
Vos
pensás,
Esta situación te aniquila
Te esfuma
Te disuelve
Pero,
¿sabés que hay algo de confort en el fracaso?
Hay
algo,
y
llamémoslo celestial ¿por qué no?
en
el hecho de fracasar
¡y
fracasar en grande, fracasarlo bien!
Porque
también para fracasar hay que tener un poco de éxito.
Puede
ser revitalizante eso de desplomarse en lo profundo ¿sabés?
revolcarse en el fango
saberse
derrotado,
porque tenés que morir un poco para alcanzar la perspectiva.
Supongo
que debe haber algo liberador en la derrota misma
¿Vos
no crees?
¿Decís
que no?
Yo
creo que si,
que
un poco de poder si tengo.
Entonces
hablemos,
hablemos
de eso,
de
los poderes que nos venimos adjudicando en este último tiempo.
No
vamos a negar que estamos envueltos en el desequilibrio
Y
que a veces nos absorbe un poco la arrogancia.
Y
estoy hablando de tu poder,
yo
no estoy hablando de vos.
Pero
si,
también.
Es
verdad que a veces sos un poco fuerte,
un
poco impune.
¿Sos?
¿Dije
sos?
quise
decir somos,
somos
quise decir.
Porque
hace tiempo que nos pienso como una dupla.
Nos
pienso, ¿viste esa conjugación verbal?
Vos y yo nos convertimos en este todo indivisible,
homogéneo,
celulario.
Porque
es casi biológico esto que nos pasa a los dos.
Mutamos,
si,
nos
amalgamamos.
Y no
fue mi intención,
Seguro
la tuya tampoco.
¿Y? ¿Podemos
hablar de eso ahora?
Yo
tengo mucho que decirte,
vos
tenés algo que decirme también ¿no?
Vos
siempre encontrás la manera de tener algo que decir
y
ese es un ingenio que te he valorado siempre.
Dale,
te escucho, decílo.
¿No
decís nada?
Bueno.
Está
bien.
Entiendo
Ahora también tu silencio se ha convertido un poco en arma de reproche.
P.A.M